CIRUGÍA
Rinoplastia
El concepto de la rinoplastia ha cambiado en los últimos años, el estereotipo de “nariz operada” ha quedado atrás y ahora lo que se nos pide es un resultado natural a la vez que bonito y en armonía con el resto del rostro. Además, los cirujanos plásticos añadimos el que sea un procedimiento amable con los tejidos de los pacientes y con resultados perdurables en el tiempo.
Así, la Rinoplastia de Preservación trata de esculpir la nariz traumatizando mínimamente los tejidos con lo que conseguimos una mejor y más rápida recuperación, respetando los músculos y ligamentos de la nariz para que esta siga participando de la mímica facial y no sea algo estático en el centro del rostro.
La rinoplastia puede reducir o aumentar el tamaño de la nariz, cambiar la forma de la punta o del dorso, estrechar el tamaño de los orificios nasales o cambiar el ángulo entre la nariz y el labio superior.
La nariz no solo es un elemento estético en el rostro, sino que además tiene un papel primordial en la respiración. Es por ello por lo que hay que realizar procedimientos que mejoren la estética de la nariz y mantengan una correcta función y, si así lo requiere, tratar los problemas respiratorios nasales en la misma intervención.
Los avances tecnológicos también se suman a la rinoplastia. La rinoplastia ultrasónica permite realizar los cortes en el hueso de una manera fina, sin lesionar la piel o la mucosa, consiguiendo resultados mucho más predecibles y menor edema postoperatorio.
Más información sobre esta cirugía
Pasos a seguir recomendados antes y después de ser intervenida
Los mejores candidatos
Los mejores candidatos/as para una rinoplastia son aquellas personas, físicamente sanas y realistas, que buscan mejorar el aspecto estético de su nariz y/o corregir una alteración en su función respiratoria.
Se realiza una simulación del perfil del que forma parte la nariz junto con la frente, el labio superior y el mentón, que quedaría tras la intervención con el fin de que el cirujano sepa qué desea el paciente. En ocasiones la mejora del perfil incluye modificaciones de la frente, el mentón, etc. que también se muestran en el estudio.
Cirugía paso a paso
-
La rinoplastia es una intervención realizada en el quirófano y bajo anestesia general.
-
Habitualmente a través de incisiones situadas dentro de las fosas nasales (rinoplastia cerrada), por lo que no hay cicatrices visibles.
-
En aquellos casos que presenten cierta complejidad como casos ya operados anteriormente, traumáticos, etc. optamos por rinoplastia abierta en la que la cicatriz es prácticamente imperceptible.
-
Finalizada la intervención, se coloca un taponamiento nasal con el que es posible respirar, y una férula de plástico en el dorso de la nariz.
-
En aquellos casos que esté indicado, se asocia una mentoplastia o cirugía del mentón, un lipofiling de la frente, etc.
La recuperación
Los pacientes no suelen referir dolor, aunque sí molestias locales. Es habitual la inflamación y la aparición de moratones en la zona de los párpados inferiores.
El taponamiento se retira a los 3 o 4 días y la férula a la semana de la intervención.
La mayoría de los pacientes podrán volver a sus actividades normales a la semana de la intervención, aunque deberán evitar durante las primeras semanas realizar ejercicios violentos o actividades que tengan riesgo de un traumatismo nasal.
Su nuevo aspecto
Día a día su nariz se irá desinflamando y definiendo. Así, en pocas semanas ya no parecerá que ha sido operado, aunque aún puede notar zonas de poca sensibilidad o induración, sobre todo en la punta de la nariz.
A los 6 meses se alcanza el resultado definitivo.
Si fue realista con sus expectativas, se sentirá satisfecho/a con los resultados.
Los mejores candidatos/as para una rinoplastia son aquellas personas, físicamente sanas y realistas, que buscan mejorar el aspecto estético de su nariz y/o corregir una alteración en su función respiratoria.
Se realiza una simulación del perfil del que forma parte la nariz junto con la frente, el labio superior y el mentón, que quedaría tras la intervención con el fin de que el cirujano sepa qué desea el paciente. En ocasiones la mejora del perfil incluye modificaciones de la frente, el mentón, etc. que también se muestran en el estudio.
La rinoplastia es una intervención realizada en el quirófano y bajo anestesia general.
Habitualmente a través de incisiones situadas dentro de las fosas nasales (rinoplastia cerrada), por lo que no hay cicatrices visibles.
En aquellos casos que presenten cierta complejidad como casos ya operados anteriormente, traumáticos, etc. optamos por rinoplastia abierta en la que la cicatriz es prácticamente imperceptible.
Finalizada la intervención, se coloca un taponamiento nasal con el que es posible respirar, y una férula de plástico en el dorso de la nariz.
En aquellos casos que esté indicado, se asocia una mentoplastia o cirugía del mentón, un lipofiling de la frente, etc.
Los pacientes no suelen referir dolor, aunque sí molestias locales. Es habitual la inflamación y la aparición de moratones en la zona de los párpados inferiores.
El taponamiento se retira a los 3 o 4 días y la férula a la semana de la intervención.
La mayoría de los pacientes podrán volver a sus actividades normales a la semana de la intervención, aunque deberán evitar durante las primeras semanas realizar ejercicios violentos o actividades que tengan riesgo de un traumatismo nasal.
Día a día su nariz se irá desinflamando y definiendo. Así, en pocas semanas ya no parecerá que ha sido operado, aunque aún puede notar zonas de poca sensibilidad o induración, sobre todo en la punta de la nariz.
A los 6 meses se alcanza el resultado definitivo.
Si fue realista con sus expectativas, se sentirá satisfecho/a con los resultados.
CASOS REALES
Antes y después de la intervención
A continuación ofrecemos diversos casos de pacientes que han confiado en nosotros para la realización de una rinoplastia.
Caso 1
Mujer joven que desea mejorar el aspecto estético de su nariz para lo que reducimos de forma importante el dorso nasal y la proyección de la punta nasal.
Conseguimos una nariz más pequeña y proporcionada con sus rasgos, mejorando el perfil de la cara y dulcificado sus rasgos faciales.
Utiliza la barra de desplazamiento para ver el antes y el después.
Caso 2
Varón joven que refiere dificultad respiratoria. Intervenido unos años antes por ORL: radiofrecuencia de cornetes con una mejoría transitoria de la respiración. Cuenta con problemas respiratorios por lo que desea mejorar la función respiratoria nasal y también la estética de su nariz.
Utiliza la barra de desplazamiento para ver el antes y el después.
Caso 3
Varón de mediana edad con dificultad respiratoria. Intervenido 17 años antes sin conseguir mejorar la función respiratoria nasal.
Conseguimos mejorar tanto la función respiratoria nasal como la estética de su nariz.
Utiliza la barra de desplazamiento para ver el antes y el después.
Caso 4
Utiliza la barra de desplazamiento para ver el antes y el después.
Mujer joven sin problemas funcionales que desea mejorar el aspecto estético de su nariz. Reducimos de forma importante el dorso nasal y la proyección de la punta nasal.
Obtenemos un perfil con una nariz más pequeña y rasgos faciales más armonizados.
Caso 5
Mujer joven que desea mejorar la estética de su nariz, sobre todo de la punta nasal. Presenta una punta bulbosa también conocida como en tapón de champán. No presenta dificultad respiratoria.
Modificamos ligeramente el dorso, y en gran medida, la punta que ha pasado de ser una punta cuadrada a una punta triangular.
Utiliza la barra de desplazamiento para ver el antes y el después.
RESUELVE TUS DUDAS
¿Preguntas?
Podemos reunirnos contigo y tomarnos el tiempo para abordar adecuadamente tus inquietudes.
